lunes, 7 de marzo de 2016

(2) con la gente afuera: 110.000 despedidos

Hace años que los argentinos no tenían como principal preocupación la preservación del trabajo.
Ahora un estudio realizado por la consultora Tendencias Econónicas confirma que en los primeros dos meses del año se registraron 110.000 despidos entre el sector privado y el sector público.
"En enero hubo 42 mil despidos, la mitad fueron del sector público y la otra mitad del sector privado", explicó José Luis Blanco, director de la consultora.
En febrero el grueso de cesantías fueron del sector privado, "principalmente de la actividad de la construcción" aunque también están siendo afectados por este panorama los trabajadores metalúrgicos y petroleros.
"No recuerdo otro año en la historia argentina en que haya habido tantos despidos", advirtió Blanco. "Es un récord, como 70 veces en relación al año pasado", concluyó.
Cerrar los números con la gente afuera. 

(1) el ajuste ya se siente en el sector industrial

El cordón industrial de la zona de Rosario y el norte de la provincia de Buenos Aires registra un deterioro de las condiciones laborales, con despidos, retiros voluntarios y suspensiones, lo que puso en estado de alerta a los gremios. 
Una de las situaciones más delicadas es la de la empresa química Ar Zinc, cuya planta de la localidad de Fray Luis Beltrán amenaza con cerrar dejando en la calle a 420 trabajadores
Las grandes siderúrgicas, Siderca y Acindar, despidieron a trabajadores de firmas contratistas controladas y aplicaron suspensiones, al tiempo que las metalúrgicas Vassalli y Bambi también echaron a contratados y prevén discontinuar la actividad
Además, se esperan despidos y suspensiones en las próximas semanas en las automotrices, especialmente en la planta de General Pacheco de Volkswagen, que afectará directamente a sus trabajadores y también a las firmas autopartistas. 
El deterioro de la rentabilidad de las firmas en los últimos años, el desplome del mercado brasileño, el tarifazo eléctrico y la apertura de importaciones, en un contexto de caída del consumo y en términos políticos más favorable para que el empresario haga su propio ajuste, son algunas de las causas que explican esta situación.