sábado, 18 de octubre de 2014

no solo desidias y torpezas

Leemos:
El juez federal de Morón, Juan Pablo Salas, el encargado de la búsqueda de Luciano Arruga, se sentía anoche muy mal. Quienes lo conocen dicen que se sentía “avergonzado” por el papel del Estado en la búsqueda de Luciano. Más allá de que todavía hay muchísimas cosas sin explicación, un primer elemento es que una persona buscada en la provincia de Buenos Aires, pero cuya muerte se produjo del lado de Capital, depende del mejor o peor trabajo de algún funcionario para que se haga el cotejo de huellas. El accidente se produjo en la misma noche en que la familia de Luciano denunció su desaparición y sin embargo no se hizo ningún cotejo con el cuerpo que en ese momento estaba en el Hospital Santojanni.
Seguramente más que una sumatoria de desidias y torpezas.

1 comentario:

Nando Bonatto dijo...

Un bochorno por donde se mire