En medio de un tumulto de periodistas, pasadas las 14.30, fue su salida luego de declarar por más de dos horas ante el juez
Bonadío.
Guillermo Moreno se presentó ante el juez como imputado por
"abuso de autoridad" e
"incumplimiento de los deberes de funcionario público", en una causa penal que se inició con la denuncia del economista
Jorge Todesca, presidente de la consultora
Finsoport.
Presentó al juez copias de las querellas que formuló contra las consultoras privadas a las que acusó de publicar informes falsos sobre la evolución de los índices de precios.
"Le expliqué al juez cómo (el CEO del Grupo Clarín, Héctor Magnetto y algunos dueños de medios y banqueros trabajaban para elevar la tasa de interés y forzar la devaluación", señaló a los periodistas tras completar el trámite en los tribunales de Comodoro Py 2002, en la Ciudad de Buenos Aires.
Moreno recalcó ante los periodistas acreditados en Tribunales, la "importancia" de la denuncia contenida en las copias de las querellas que entregó al magistrado. Los datos y conclusiones que figuran en esas denuncias "son oro en polvo", enfatizó.
El funcionario dijo que estuvo "dos horas" hablando ante el juez y que entregó "material" al magistrado. Antes de retirarse lanzó: "chau, compañeros, que estén bien. Hasta luego, voten bien en octubre".