jueves, 6 de junio de 2013

¿se acuerdan cuándo clarín presentó a moyano con las manos cubiertas de sangre?

Con el dibujo de Hermenegildo Sábat y con una réplica pública del dirigente contra el diario en una de las tantas portadas adversas de Clarín contra el camionero donde lo denunciaba como lavador de dinero?.
El portal DsD recuerda como el matutino usó ayer el título principal de portada para presentar una acusación del líder sindical contra el oficialismo nacional, al que le adjudicó una “movida” destituyente contra el gobernador Daniel Scioli. En lo que va del año, Clarín ya mencionó dos veces en el título central a Hugo Moyano y en ambas ocasiones lo trató favorablemente:
De insinuar que estaba complicado en algún asesinato y que lavaba dinero pasó a ser vocero de denuncias creíbles contra el gobierno. 
Los miserables caminos de Magnetto.

inauguran en estos pagos una comisaría vacía

Con apuro e improvisación el sábado se inauguró una "comisaría" el sábado anterior, que según se pudo detectar por acá, no tenía telefonos, ni internet y los policías los pidieron prestados desde otras comisarías locales dejando también un vacio en ellas.
Había una expectativa nacional por la "respuesta" de Scioli a Cristina por esas cuestiones de la lealtad que la presidenta no siente en algunos funcionarios. Crónica TV transmitió el acto en directo y hubo una cobertura nacional. Pero adentro de la "comisaría" solo dos cuadros: una foto del gobernador y uno que hablaba de "getión Lunghi", el intendente radical.

el macrista angelici habló durante siete horas

Ayer declaró  como testigo ante el tribunal que investiga la presunta existencia de una asociación ilícita enquistada en la barra brava, destinada a recaudar fondos mediante actividades ilegales para, entre otras cosas, garantizar un buen pasar del jefe del grupo, Mauro Martín, en la cárcel de Ezeiza, y posibilitar que su ex aliado y hoy virtual enemigo Maximiliano “Maxi” Mazzaro permanezca prófugo.
Además del juez, el secretario Daniel González, el fiscal Madrea y de a ratos, abogados de imputados. Tras un inicio de declaración frío y tenso, Angelici comenzó a mostrarse molesto a medida que le iban exhibiendo las pruebas sobre las cuales se basaban las preguntas. Entonces el clima comenzó a variar y el diálogo se tornó fluido y según la impresión generalizada, “sincero”. El presidente de Boca nunca estuvo cerca de autoincriminarse, pese a que las preguntas fueron incisivas. Reconoció a los barras cuyas fotos le exhibieron (con algunos ni siquiera fue necesaria una observación detenida), se mostró en desacuerdo con sus actividades y en ese sentido hizo hincapié en que adoptó medidas para dejar de emitir y vender tickets como un mecanismo para cortarles una de las fuentes de financiamiento: la reventa.
Aunque sólo se trató de una respuesta formal el macrista presidente de Boca explicó que las cuestiones relacionadas con la seguridad y con el derecho de admisión son resortes que pasan por el fiscal federal y simpatizante de Boca Carlos Stornelli. De hecho, en la causa aparece acreditado que el pedido de levantamiento de derecho de admisión para un grupo de barras, por pedido –desde la cárcel– de Mauro Martín, contó con la venia del fiscal y es ministro de Seguridad bonaerense durante el primer gobierno de Daniel Scioli.
No pudo, hasta que el tribunal se lo mostró, establecer la relación entre esos carnets y los que según el juez se alquilaban para facilitar el ingreso de público al estadio y recaudar dinero para la barra.
En cuanto a las escuchas telefónicas en las que aparecen mencionados el vicepresidente Juan Carlos Crespi y el secretario general César Martucci (este último por su apodo), Angelici adujo que desconocía si efectivamente tenían con la barra la relación que parece surgir de las grabaciones. Y especialmente se mostró enojado cuando se le exhibió otra prueba, contundente a criterio del tribunal, que compromete a otro directivo de alto rango, Marcelo London.
Se sorprendió y por momentos se mostró ofuscado porque desconocía la mayoría de las pruebas que recolectó el juez de instrucción Manuel De Campos y el fiscal Andrés Madrea, especialmente filmaciones en las que se observa de qué manera la barra ingresa al estadio prácticamente sin obstáculos a su paso. 
Se fue del juzgado con un panorama muy diferente al que tenía cuando llegó