sábado, 12 de diciembre de 2009

volver a matar y las señales a la distancia




Se acuerdan cuando en las largas rutas argentinas se saludaban a la distancia los coches de la misma marca cuando se reconocían?.

Así sucedió este viernes entre Menéndez y Posse, Astiz y Yofre.

Una fue cuando el represor Benjamín Menéndez hizo su alegato final y lo fundamentó citando al flamante ministro de Educación Porteño, Abel Posse.


El artículo del flamante ministro porteño Posse fue publicado en La Nación el 12 de octubre de 2006. La frase a la que hizo alusión dice: "Ningún país repudió a su ejército por lo que le exigieron sus gobiernos. Ni Francia por lo de Argelia ni Alemania por las matanzas de Rusia ni Rusia por las masacres de Polonia y Berlín ni Estados Unidos por Hiroshima. Para bien o para mal, los ejércitos somos todos, los gobiernos somos todos. Como afirmó Sartre, todos somos responsables de nuestra historia".

Después del alegato el Tribunal Oral Federal 1 de Córdoba lo condenó a perpetua en el juicio que lo tenía como principal imputado al ex titular del Tercer Cuerpo del Ejército, por delitos de lesa humanidad cometidos en esa provincia durante la última dictadura militar.

La otra cuentan que fue cuando Astiz entró con el libro Volver a Matar de Tata Yofre al Tribunal Federal Oral Número 5 capitalino en el inicio del juicio oral a él y otros 18 represores que actuaron en la Escuela de Mecánica de la Armada (ESMA), emblemático campo de concentración de la dictadura por donde pasaron unos 5.000 desaparecidos, incluidas las monjas francesas Alice Domon y Léonie Duquet.

En la primera audiencia del juicio oral, Astiz mostró una actitud provocadora y sonreía mientras mostraba un libro llamado "Volver a matar" y jugaba con un bolígrafo con aire indiferente, constataron periodistas de la AFP.

Astiz, Posse, Menendez, Yofre...

Se reconocen a la distancia, viste..?